No seas un gurú por favor

Haz lo que quieras. Sueña con tu futuro y trabaja para él. Pero no quieras ser un gurú. Ni siquiera dejes que te presenten como tal, en clases, conferencias, etc.

Pero el colmo de todo esto, y esto es verídico, es que ayer me pasaron un link a un foro, en el que un especialista (dejemoslo ahí) decía que se consideraba un especialista en cierto tema, que daba clases y demás, pero quería dar el siguiente paso, quería ser un gurú. Que si alguien le podía echar una mano y dar recomendaciones para ver que tipo de marketing tenía que hacer y que acciones para convertirse en un gurú. Desde que se dijo que nadie llevaría un teléfono inteligente en el bolsillo, creo que no he escuchado una burrada parecida.

He visto bastantes cosas en el mundo profesional. Pero esto pasa los límites de la ciencia ficción y entra en el dominio de series del tipo House, mentalista, Castle y derivados. Se nos ha ido de las manos.

He visto gente asentir con la cabeza con sonrisa ancha mirando al público, cuando la presentaban delante de más de 100 personas como el gurú de tal materia o disciplina. Eso ya me parece fuerte, tan fuerte como su ego. Pero, que ya digas publicamente que quieres ser un gurú y preguntar qué tienes que hacer para ello, roza mis límites. Lo primero que tienes que hacer es trataros, hablo en plural, porque tu psicólogo te cobrará el doble por hora, ya que sois dos personas, tú y tu ego. Así que dile que necesitaréis dos divanes para tumbaros los dos juntos.

No perdamos la perspectiva humana y olvidemos las etiquetas. Lo mejor que he visto en mi vida, es a gente ordinaria hacer cosas extraordinarias.

Para terminar, parafraseando al gran Aitor Contreras, relativo a este asunto, comentó que él estaba buscando info para Chamán, con especialidad en Danza de la Lluvia. Muy grande Aitor, paténtalo, por si acaso.

 

Foto: Seth Godin figure